En nuestro plan de mejora medioambiental uno de nuestros principales objetivos es la reducción de la contaminación atmosférica porque nos preocupan las emisiones de CO2 pero, ¿qué podemos hacer nosotros? Como fabricantes, la reducción de estas emisiones forma parte de este plan y es, sin duda, la mayor aportación que podemos hacer. No en vano, mantenemos un sistema de gestión medioambiental, según ISO 14001 desde el año 2004, cuando muchas empresas todavía ni se lo habían planteado, un sistema además que incluye todas las fases de producción con las exigencias legales y voluntarias que ello conlleva.
Otro de los puntos donde también creemos que podemos aportar nuestro “granito de arena” es en la optimización y eficiencia del transporte de mercancías y por ello un uso racional de camiones por vía terrestre es una preocupación constante en esta empresa. Tras un minucioso estudio, llegamos a la conclusión de que el uso de camiones propios no solo aporta un valor añadido al servicio de nuestros clientes sino que también se optimiza su uso y, llevamos años programando cuidadosamente las rutas en colaboración con los Distribuidores de la marca para que los camiones vayan completos y organizados. A veces supone un esfuerzo para el cliente esperar la ruta programada, pero todos sabemos que merece la pena y siempre contamos con su ayuda y colaboración para que todo funcione.
Un punto más allá y buscando siempre una mejora medioambiental continua, nos planteamos de forma paulatina la renovación de la flota en cumplimiento con la normativa europea Euro 6, con vehículos con tecnología Adblue. Y ya esta aquí, otro nuevo camión de delaOliva con esta tecnología que ya está circulando por nuestras carreteras. El Euro 6 es la nueva revisión de la exigente normativa europea para el control de emisiones contaminantes para vehículos y establece límites mucho más estrictos de emisiones para los vehículos en lo referente a partículas yóxidos de nitrógeno.
Los motores diésel generan menos cantidad de productos contaminantes y CO2 pero, por desgracia, emiten otros gases muy peligrosos y que deben ser reducidas en la medida de lo posible: los óxidos de nitrógeno (NOx) y las partículas en suspensión presentes en la ceniza que genera la combustión del gasóleo. Estos gases son nocivos para la salud pues provocan problemas respiratorios y, reaccionan con otros compuestos para originar a su vez otros contaminantes atmosféricos (lluvia ácida, smog fotoquimico, etc). El AdBlue es esencialmente un aditivo que se almacena en un depósito especial instalado a la salida de los gases de escape, a la salida del tubo de escape. En ese dispositivo, AdBlue se pulveriza a altas temperaturas, generando un proceso químico mediante el cual genera amoniaco. Este compuesto logra que el NOx de los gases del escape se descomponga en nitrógeno y agua, que son menos nocivos para la salud y el medio ambiente.
Todo para contribuir a un desarrollo sostenible, que satisfaga las necesidades del presente sin comprometer las necesidades del futuro.